Premio Estudios Financieros 2020. Entrevista. Primer Premio Derecho del Trabajo y Seguridad Social

Mié, 04/11/2020

Roberto Fernández

‘Implicaciones jurídico-laborales de la COVID-19: lecciones judiciales para garantizar un futuro más seguro’ es el título del trabajo que obtuvo el Primer Premio en la modalidad de Derecho del Trabajo y Seguridad Social en el Premio Estudios Financieros 2020, cuya autoría corresponde a Roberto Fernández, Profesor Titular de Universidad de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de León.

¿Podría resumirnos su trayectoria investigadora?

Mi trayectoria investigadora comienza en el año 1999 como becario de investigación dentro del área de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de León. En su seno he desarrollado toda mi actividad científica y gracias a las enseñanzas de mis maestros, el Profesor Germán Barreiro González, y sobre todo mi director de tesis, el Profesor Juan José Fernández Domínguez, he ido adquiriendo una serie de destrezas y habilidades a lo largo de los años en materia investigadora que me han permitido alcanzar los frutos que, como este premio, son reconocidos fuera de mi núcleo de actuación.

Me siento afortunado de formar parte de un grupo de investigación que no solamente conforma un colectivo de profesionales cohesionado y con una gran capacidad de trabajo, siempre a la vanguardia de la docencia y la investigación, sino una verdadera familia capaz de generar un ambiente de trabajo donde es un verdadero placer desarrollar una actividad profesional, además de constituir un referente en la doctrina laboralista española y cuyos logros corrobora el Centro de Estudios Financieros de vez en cuando, pues alguno de sus componentes viene siendo galardonado cada ciertos años con un primer premio o algún accésit.

No quisiera olvidarme de mis paisanos de Ferreras de Cepeda, lugar donde he pasado parte de los momentos más felices de mi vida y donde he desarrollado parte de mis investigaciones; de mi familia, mis padres Benigno y Charo y mis hermanos Miguel, Naty y Edu, porque a ellos les he robado momentos personales para poder construir mi trayectoria profesional; de mi actual pareja, Ana Castro Franco, con quien espero construir un futuro feliz y acompañarla durante muchos años en una trayectoria vital y profesional compartida; en fin, de mi queridísima amiga, María José Sánchez Ledesma, cuyos consejos y quedadas salmantinas añoro de manera continua, aunque sé que en el cielo me está vigilando y velando por mí.

¿En qué consiste la investigación y cuál ha sido la conclusión?

El tema surgió de la colaboración que mantiene el área de conocimiento de Derecho del Trabajo de la Universidad de León con los operadores jurídicos leoneses. Un auto sobre el sector sanitario que le remitió el Magistrado del Juzgado de lo Social número 1 de León, Jaime de Lamo Rubio, y otro sobre ayuda domiciliaria que le envió el Presidente Provincial del sindicato CSIF, Hipólito Riesco Álvarez, sirvieron de punto de partida al conjunto de sentencias que sobre el coronavirus estaban dictando los Tribunales de Justicia.

La principal conclusión a la que ha llegado es que una de las tareas más inminentes a afrontar una vez se vea superada en mayor o menor medida la actual situación, será reflexionar sobre cómo reforzar los mecanismos de coordinación en determinadas competencias descentralizadas, a fin de que desde el Gobierno Central se puedan tomar decisiones más acertadas a la hora de hacer frente a posibles situaciones futuras, no deseables pero bastante probables, similares a la pandemia provocada por la COVID-19, y sin que ello se pueda interpretar como un ataque al ejercicio de las competencias de las Comunidades Autónomas.

¿De qué modo los resultados de la investigación pueden repercutir en la sociedad?

Creo que una de las principales lecciones a extraer del trabajo y que pueden servir para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos es la necesidad de reforzar los mecanismos del Estado del Bienestar y entender que la iniciativa privada en determinados sectores debe ser complementaria, y no sustitutiva, de la actuación pública.

Asimismo, otra de las enseñanzas que nos está dejando la pandemia es la importancia de no bajar la guardia en el futuro y mantener un repositorio de equipos de protección colectivos e individuales que, en caso necesario, permita suministrar de manera rápida y eficaz herramientas de protección óptima para todos aquellos que tengan que estar en primera línea luchando frente a frente contra esta u otras posibles pandemias.

Para finalizar, es menester ofrecer las medidas de protección a aquellos profesionales que han estado más expuestos a la pandemia, y que lo siguen haciendo, pues muchas de las sentencias analizadas han tenido que ver con las condiciones en las que han tenido que ejercer su actividad profesional en la lucha contra la pandemia.

¿Cuál es la situación que atraviesa en materia de investigación y desarrollo el área de conocimiento de la que es experto?

Del Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social se dice ya desde hace muchos años que está en crisis y buscando su esencia pues cada poco tiempo encuentra sus bases discutidas o, su carácter dinámico y su evolución acompasada a los tiempos, le lleva a sufrir reformas legislativas de amplio calado.

La crisis de la COVID-19 constituye un buen ejemplo, pues se han tenido que adoptar medidas de urgencia en materia laboral y de Seguridad Social para hacer frente a la pandemia, de manera que algunas de las decisiones coyunturales que se adoptaron durante el estado de alarma en el estado todavía hoy siguen vigentes o se han desarrollado como consecuencia de las ineficiencias detectadas durante dicha situación. Así, y por citar solamente algunos ejemplos, cabe señalar la regulación de los ERTES, la consideración como contingencia profesional de las dolencias derivadas del coronavirus o, por no seguir, la recientemente promulgada regulación del trabajo a distancia.

¿Por dónde podría avanzar la línea de investigación planteada en su trabajo?

La línea planteada en el trabajo puede avanzar tomando en consideración la interpretación que los Tribunales van a realizar en los próximos meses de las medidas adoptadas durante el estado de alarma, añadiendo aquellas otras que se están adoptando en estos momentos en relación con la nueva normalidad. Casos litigiosos no van a faltar al respecto, y como ejemplos señeros tenemos la sentencia del Tribunal Supremo de 8 de octubre de 2020 sobre la responsabilidad de las Administraciones Públicas en relación con la protección del personal sanitario que viene a reconocer la falta de medios pero, sin embargo, considera que dicha declaración no supone ningún juicio de culpabilidad ni imputación de responsabilidad; o el Auto del Tribunal Superior de Justicia de Madrid de 8 de octubre de 2020 que tumba las medidas adoptadas por el Gobierno de España para Madrid y que han supuesto la declaración de un nuevo estado de alarma circunscrito únicamente a partes de ese territorio.

¿Cómo valora el Premio Estudios Financieros y las ayudas que comprende a la investigación?

Quiero agradecer, como ya hice en el acto de entrega del premio, al Centro de Estudios Financieros, y a su alma máter, Roque de las Heras, a sus hijos y a todo el equipo que conforma el grupo CEF.- y UDIMA, la apuesta decidida que llevan haciendo durante tantos años por premiar la investigación en España en temas jurídicos y de recursos humanos. Sin duda, son un ejemplo a seguir por su tesón en apoyar la divulgación científica a través de la gran variedad de revistas, monografías, manuales y una gran panoplia de publicaciones que año tras año ven la luz en un mundo editorial cada vez más complicado y lleno de incertidumbres, pero ellos no se dejan influir por el desaliento y continúan realizando una labor digna de elogio.

En cuanto al premio, su dilatada trayectoria (algunas modalidades como Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social ya van por la XXX Edición) y la garantía del anonimato en la presentación de trabajos y en la evaluación por parte de los Jurados para seleccionar los más destacados, lo han convertido en el más prestigioso galardón de naturaleza jurídica en España.

A ello hay que unir, no se puede obviar, una dotación económica bastante elevada para esta clase de premios (además libre de impuestos lo que es de agradecer una vez más), que va acompañada de la publicación en las prestigiosas revistas del Centro de Estudios Financieros y del reconocimiento social para muchos de los galardonados por parte de compañeros y familiares.

En conclusión, la valoración del premio no puede ser más positiva, en particular para quien, cómo yo, ha tenido la suerte de ser galardonado en más de una ocasión, pues el premio constituye un orgullo por reconocer la labor investigadora y sirve, a la vez, de fuente de alimentación para continuar desarrollando tan gratificante actividad científica.