Entrevista de trabajo: ¿La preparo o me muestro como soy sin más?

La entrevista de trabajo es un punto culminante en el proceso de búsqueda de empleo. El objetivo es obtener un puesto laboral vendiendo la mejor candidatura posible a la empresa demostrando aptitudes, conocimientos, habilidades y experiencia idóneas para ocupar la vacante.

Redacción CEF.- Media

Cada entrevista tiene un contexto diferente. El primer paso es el envío de la candidatura a través de portales de empleo o correo electrónico. En este caso, el intercambio de información debe ser de calidad y cubrir todas las necesidades de las empresas y demostrar que el aspirante encaja perfectamente mejor que otros candidatos.

El paso del envío de la candidatura al proceso de selección presencial o entrevista personal marca una relación en el que el entrevistador evaluará una serie de áreas determinadas en función de la actividad y el puesto vacante.

Antes de acudir a la entrevista es interesante repasar los datos que figuran en el currículo para responder con honestidad a las cuestiones que se planteen durante el proceso. Una primera evaluación de los conocimientos, itinerario académico y proyectos de estudio futuros seguido de la trayectoria profesional se abordarán en los primeros minutos de la entrevista.

Motivación y autoevaluación serán las siguientes cuestiones que pronostiquen el rendimiento potencial de formación y profesión, así como, los puntos débiles y fuertes, seguridad, confianza y sinceridad.

Preparar la entrevista

Es recomendable acudir a la entrevista con una idea clara sobre los objetivos profesionales, saber explicar los fundamentos de la elección de esa empresa y no otra y por qué desarrollar la carrera laboral en esa empresa es óptimo para el futuro.

Las empresas valoran el hecho de que se hayan informado sobre sus actividades, productos, marcas, organigrama y competidores o clientes. Conocer la empresa y el cargo puede contribuir con la experiencia de crecimiento y dará a los reclutadores una buena impresión, debido al interés mostrado.

Otro aspecto de gran utilidad es practicar previamente la entrevista actitudinalmente. Es decir, el saludo inicial, la forma de caminar, la posición mientras está sentado durante la reunión, tono de voz o lenguaje apropiado. Todo esto garantiza que se proyecte una imagen alineada con los valores y metas profesionales. Siempre autenticidad.

Antes de enfrentar la entrevista, hay que conocer al detalle las aptitudes, experiencia y formación que muestra el currículo. La relación de puntos débiles y fuertes junto a los argumentos que lo defiendan será clave para mostrar confianza y seguridad al reclutador.

Preparar la entrevista de trabajo es muy importante para conseguir llegar al objetivo final, conseguir el empleo y en ello te puede ayudar la Bolsa de Trabajo y Emprendedores.